Los empresarios de Cataluña exigen en la Diada a Torra que no ahuyente a los clientes del resto de España

Este viernes se celebra el Día de Cataluña, que este año está marcado por la falta de concentraciones ante la pandemia del covid-19. Sin embargo, no es un día de celebración para todos los catalanes, ya que los empresarios denuncian que el Presidente de la Generalitat, Quim Torra, «desprecia a las instituciones de todos los españoles por lo que ahuyenta a nuestros clientes y proveedores», protestan los empresarios de Cataluña. 

El presidente de Empresarios de Cataluña, Carlos Rivadulla, remarca a OKDIARIO, que «los empresarios catalanes lo que queremos es que nos dejen trabajar  y que no se meta el Gobierno de la Generalitat con nuestros clientes y proveedores de España que es a lo que se está dedicando». «Al final lo que está haciendo es despreciar a las instituciones de todos lo españoles, y eso nos perjudica», remarca.

Hay que recordar que en los últimos años, numerosas empresas han optado por mover su sede fuera de Cataluña con motivo del movimiento independentista catalán, y la inseguridad jurídica que promueven las instituciones de Cataluña. «Queremos que se centren en trabajar sin ponernos trabas y que se trabaje para fomentar la economía y  arreglar los problemas de las empresas catalanes», añade Rivadulla.

«Tenemos que entender que la crispación que existe repercute en el conjunto de la sociedad catalana. Al final los políticos dedican un gran porcentaje de su tiempo y recursos a enfrentarnos y meter cizaña. Lo que deberían hacer es garantizar la seguridad jurídica fundamental para los empresarios de Cataluña y gestionar la vuelta de las empresas. Porque nos ha afectado y mucho que se hayan ido tantas empresas fuera de Cataluña», defiende el presidente de Empresarios de Cataluña.

Fusión Caixabank-Bankia

Rivadulla también ha recordado la operación de fusión anunciada recientemente entre Caixabank y Bankia, que ha puesto como ejemplo de la situación que vive el tejido empresarial en Cataluña. «Lo de la Caixabank y Bankia no deja de ser un ejemplo más de cómo las empresas no confían en nuestras instituciones y buscan otros mercados e inversores para así desentenderse e los problemas que genera el independentismo. La realidad es que las grandes empresas se siente incomodas con la administración catalana», señala.

«Lo que no se puede permitir es que los consejeros autonómicos catalanes no acudan a las reuniones del sector empresarial, porque crean que ellos tienen que ir por separado. Ellos tienes que dedicarse a tender puentes y no estar enfrentados con el Gobierno central. Si no hay buenas relaciones con la Administración, eso afecta a los negocios. Es un desastre absoluto, solo crean inseguridad», protesta Rivadulla.

Esta misma semana, el empresario independentista Joan Canadell, presidente de la Cámara de Barcelona, atacó la posible fusión de Bankia con CaixaBank. «Será un paso más para concentrar el poder en Madrid y alejarse de los orígenes catalanes para siempre», dijo en su cuenta de Twitter. El empresario separatista considera que es «una lástima, y una consecuencia más de no tener un Estado a favor» y anunció que la Cámara se opondrá a la fusión en el patronato de la Fundación Bancaria La Caixa.

Canadell considera que «es cuestión de tiempo que la Caixa sea plenamente españolizada para siempre y pierda los orígenes», y ha lamentado que las cajas catalanas hayan sido absorbidas por bancos cuyas sedes no están en Cataluña; lo mismo ha ocurrido con las cajas de origen vasco y otras, ha asegurado.